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Primero las partes bajas, de dentro hacia fuera, de las partes ligeras a las pesadas. Estas son las reglas generales que guían la secuencia de montaje.

Mientras que en los métodos de construcción clásicos de los fabricantes de vehículos establecidos, una carrocería coloreada en un baño de pintura por inmersión suele rellenarse después con componentes, la estructura de bastidor multiparte del TWIKE 5 permite construirla por capas.

El montaje por capas (primero las piezas inferiores) sobre una plataforma de trabajo regulable en altura permite así un flujo de trabajo ergonómico y que ahorra tiempo.

El premontaje de subconjuntos brinda la oportunidad de realizar procesos de trabajo a pequeña escala cerca de la carrocería y de clasificar estos conjuntos, teniendo en cuenta la accesibilidad en el montaje final (desde el interior hacia el exterior).

Un puente grúa sobre un carro alineado con la posición de la plataforma de trabajo ayuda al trabajador a colocar los conjuntos en la posición deseada de forma suave para el cuerpo y precisa.

Tras la tercera fase de montaje final, se habrán unido más del 50% de todos los componentes del vehículo, lo que proporcionará una base sólida para la carrocería, que tarda menos de ocho horas.

Para una serie pequeña, este tiempo de montaje tan ajustado es ambicioso, pero según nuestra evaluación y la comparación con los valores empíricos del montaje del TWIKE 3, es posible.

Uno de los retos que hay que superar sigue siendo la optimización de todos los procesos de montaje previos, cumpliendo al mismo tiempo todos los requisitos de calidad.